viernes, 26 de agosto de 2011

Como Vencer La Tentacion

Por El Pastor Elieser Cruz

Propósito Específico: Demostrar con el ejemplo de Cristo que podemos vencer la tentación con la ayuda y autoridad divina.

Tema: Como Vencer Las Tentaciones

Texto: Mateo 4:1-11

Introducción:
¿Que Es La Tentación?

1. Instigación o estímulo que induce el deseo de algo.
2. Significa poner a prueba o solicitar al mal.
El ser tentado no constituye pecado, el ceder a la tentación, si constituye pecado. El Diablo o Satanás puede de alguna forma, quizás, crear la situación para que se produzca la tentación, pero él jamás podrá hacer que nadie haga algo que la persona no quiera hacer.

Alguien dijo que “nadie está graduado en el arte de la vida mientras no haya sido tentado”. La vida es como un gran campo de batalla donde peleamos todos los días con las tentaciones que pretenden seducirnos para que echemos por tierra nuestros más apreciados valores. Desde que nuestros primeros padres pecaron en el huerto del Edén, la humanidad quedó como un blanco seguro para ser tentada.


Proposición: La vida de Jesucristo, es un modelo que nos enseña a confrontar las diversas situaciones difíciles que sufre el cristiano. En esta ocasión, el Señor Jesús nos muestra cómo vencer las tentaciones, sin importar la naturaleza que estas tengan.

ORACIÓN DE TRANSICIÓN: Consideremos las estrategias que usó el Señor para vencer las tentaciones



I. La tentación y su variedad:
1. La tentación toca nuestros “deseos” (v. 1-3).
2. La tentación toca nuestras “emociones” (v. 5, 6)
3. La tentación toca nuestras “aspiraciones” (v. 8, 9)
C. Jesús no sucumbió ante ninguna.

II. Para Vencer En Todo Momento.
A. La tentación siempre debe ser vencida.

1. Uno de los más grandes autoengaños que sufre el cristiano, es que se “justifica” por ceder ante cierta tentación.

2. ¿Le ha pasado alguna vez? ¿Cree usted que Jesús no tenía buenas razones para ceder ante la tentación?
a. Considere la primera de ellas, “…tuvo hambre…” por haber estado “ayunando por cuarenta días y cuarenta noches”. ¿No eran estas, acciones piadosas? Luego, Jesús pudo haber dicho, “¿Por qué no? ¿Qué tiene de malo? Después de todo, voy a satisfacer una necesidad.
b. Sin embargo, detrás de la necesidad, había otras realidades y propósitos: “La duda”, la “obtención” del alimento, el fin, “de verdad yo puedo hacerlo”.
c. El cristiano, en medio de la tentación, cree que tiene razón para ceder. ¿Es la necesidad razón para ello? ¿Es al medio, uno que sea correcto? ¿Es el momento adecuado?

B. La tentación nunca es positiva, nunca es buena.
1. La tentación es muy engañosa.
a. Se presenta en el momento preciso, no antes. Nótese que lo dicho en el verso 3, no vino durante los “cuarenta días y cuarenta noches” de ayuno, sino después de estos.

2. La tentación es seductora.
a. Las palabras del diablo ilustran dicha característica, se habla de “pan”, es decir, de lo que satisface lo que esta “sintiendo”. Jesús “tuvo hambre”.

3. La tentación es mortal.
a. Jesús dijo, “no solo de pan vivirá el hombre”, ¿puede vivir el hombre, “solo de pan”? ¡No! Suceder ante la tentación es un asunto de vida o muerte.

III. ¿Cómo Vencerlas?
A. Fundamentados en la “Palabra de Dios”.
1. En cada caso, Jesús siempre respondió, “Escrito está”.
2. La palabra de Dios nos provee, indicándonos el medio y el momento adecuado para satisfacer nuestras necesidades y aspiraciones.
a. ¿No hizo así con los hebreos, cuando tuvieron hambre? (Deuteronomio 8:3)
B. Fundamentados en la Palabra de Dios, correctamente fundamentados (v. 6-10).

C. Alejar los pensamientos que nos llevan a ceder ante la tentación (v. 10-11; 1 Corintios 10:13).


Conclusión.
Jesús nos da ejemplo para: Vencer todas las tentaciones, y para vencer en todo momento. Así que, estemos alerta, pues en el momento que la tentación se haga presente, llevemos acabo lo que hemos aprendido del ejemplo de Jesús, y vencer así toda tentación.
Santiago 4:7
Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, y huirá de vosotros.


Dios no permitirá que seas tentado mas allá de lo que puedes resistir. Con la prueba también te da la salida.

1 Corintios 10:13
No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea humana; pero fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más de lo que podéis resistir, sino que dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis soportar.

1. Estad alerta contra la tentación- 1 Pedro 5:8

2. Reconoce tus debilidades y preséntaselas a Cristo- 2 Corintios 12:5,9

3. El que resiste la tentación será recompensado- Santiago 1:12

4. Si cayeres en tentación pecando (a todos no ocurre en algún momento dado) abogado tenemos para con Dios, Jesucristo- 1 Juan 2:1
Haz una oración a Dios pidiendo perdón y serás limpio de nuevo.

viernes, 8 de julio de 2011

Cuando Dios Se Esconde

Propósito Específico: Que los oyentes entiendan Que Dios Aparentemente se esconde con la intención de probar nuestra fe.
Tema: Cuando Dios se esconde

Texto: Salmo 13
13:1 ¿Hasta cuándo, Jehová? ¿Me olvidarás para siempre? ¿Hasta cuándo esconderás tu rostro de mí?
13:2 ¿Hasta cuándo pondré consejos en mi alma, Con ansiedad en mi corazón cada día? ¿Hasta cuándo será enaltecido mi enemigo sobre mí?
13:3 Mira, óyeme, Jehová Dios mío: Alumbra mis ojos, porque no duerma en muerte;
13:4 Porque no diga mi enemigo, Vencílo: Mis enemigos se alegrarán, si yo resbalare.
13:5 Mas yo en tu misericordia he confiado: Alegraráse mi corazón en tu salud.
13:6 Cantaré á Jehová, Porque me ha hecho bien.
Introducción:
Hay ocasiones en la vida en que es fácil ver la presencia de Dios. Cuando nace un niño sano, el gozo de los padres refleja el gozo de Dios como Padre. Cuando un alma decide aceptar a Cristo como Salvador, se siente la presencia de Dios en ese lugar. Cuando una persona es milagrosamente sanada, Dios recibe la gloria - y con buena razón.
¿Qué pasa, sin embargo, cuando Dios se esconde? ¿Qué sucede en la vida del profesor de seminario cuya esposa da a luz un niño discapacitado, un niño que drenará recursos de la familia toda su vida? ¿Qué pasa con aquel misionero que fallece, su cuerpo estremecido por el dolor, mientras personas alrededor del mundo están seguros que Dios lo va a sanar? ¿Dónde está Dios en estas ocasiones?
Algunas personas creen que Dios nunca se esconde, que si solamente tenemos fe suficiente, El siempre obrará de acuerdo con nuestras peticiones. Estas personas suelen tener poco tiempo en el evangelio, o estar viviendo en un mundo de fantasía. Un leve recorrido de las páginas de la Biblia nos demuestra que la experiencia de los héroes bíblicos fue muy distinta.
Job, por ejemplo, sufrió grandes pérdidas económicas, familiares y de salud. Sus amigos trataron de convencerle que él tenía la culpa, que tenía que estar ocultando algún pecado para estar sufriendo de tal manera. Dios, sin embargo, tuvo otra estimación. Su Palabra nos dice que, en todo esto, Job no pecó.
Cuando los discípulos de Jesús vieron a un hombre ciego, se pusieron a discutir si era el hombre o sus padres que habían pecado para que naciera sin ver. No les cupo en el cerebro la posibilidad de que alguien pudiera sufrir sin haber hecho algo para merecerlo. Jesús corrigió su error.
El salmista David también experimentó la ausencia de Dios. Sabemos que él la experimentó en una ocasión por su pecado. Cuando pecó con Betsabé, se sintió muy lejos de Dios - y con buena razón. En otras ocasiones, sin embargo, él sintió que Dios estaba ausente - pero sabía que, como Job, él no había hecho nada para merecerlo.
Hoy me siento algo como David. No me explico lo que Dios está haciendo. Bien reza el dicho: El hombre propone, mas Dios dispone; sin embargo, ¿qué hacemos cuando hemos hecho planes, pensando que eran de Dios, y El no actúa de acuerdo con nuestras expectativas?
La reacción del rey David hace tres mil años ha sido grabada por inspiración del Espíritu Santo para que podamos aprender de ella, y saber cómo responder cuando Dios se esconde.
Lectura: Salmo 13
13:1 ¿Hasta cuándo, Jehová? ¿me olvidarás para siempre? ¿Hasta cuándo esconderás tu rostro de mí?
13:2 ¿Hasta cuándo pondré consejos en mi alma, Con ansiedad en mi corazón cada día? ¿Hasta cuándo será enaltecido mi enemigo sobre mí?
13:3 Mira, óyeme, Jehová Dios mío: Alumbra mis ojos, porque no duerma en muerte;
13:4 Porque no diga mi enemigo, Vencílo: Mis enemigos se alegrarán, si yo resbalare.
13:5 Mas yo en tu misericordia he confiado: Alegraráse mi corazón en tu salud.
13:6 Cantaré á Jehová, Porque me ha hecho bien.
No conocemos las circunstancias que llevaron a David a escribir estas palabras. Hay varios momentos en su vida que podrían haber sido apropiados. En realidad, no es necesario que conozcamos los detalles, pues Dios nos ha dado estas palabras a nosotros para que podamos aplicarlas a nuestras propias vivencias.
En distintos momentos, como sucedió con David, podemos experimentar la aparente ausencia de Dios. Podemos preguntar: ¿Hasta cuándo? ¿Hasta cuándo seguiré con este sufrimiento? ¿Hasta cuándo me faltará la paz?
Podemos sentir, como David, que Dios se ha olvidado de nosotros. Sabemos que Dios no se olvida, que Dios lo sabe todo; sin embargo, así nos sentimos a veces. Parecería que Dios ya no se acuerda de nosotros o de nuestra necesidad.
Alguien me contó una vez de su patrón que prometía mucho, pero daba poco. Cuando le pido algo, me dice que sí; pero luego no se ve nada -dijo esta persona. A veces nos sentimos así con Dios, aunque quizás no nos atreveríamos a decirlo. Sentimos que Dios no ha cumplido lo que nos prometió.
Podemos sentir que Dios está escondiendo el rostro, para no ver nuestra situación y tener que responder. De noche, nuestros pensamientos dan vuelta en nuestra cabeza como buitres revoloteando sobre un cadáver; de día, nuestro corazón siente sólo dolor y pesar.
Lo peor es que, en esta situación, los que se oponen aprovechan para burlarse de nosotros. ¿Dónde está su Dios? -dicen. ¿Por qué no responde a su necesidad? Nos duele que se burlen de nosotros, y nos duele que se burlen de nuestro Dios.
El enemigo de nuestras almas, y los enemigos humanos que se oponen a Dios y a su voluntad, siempre buscan oportunidades para criticar y para burlarse. El hombre justo enfrentará las burlas y las críticas de los que no conocen a su Dios.
Jesús lo sufrió cuando fue crucificado. Durante la farsa que fue su juicio, los soldados le decían sarcásticamente: "Salve, rey de los judíos. " Cuando fue crucificado, los que pasaban le decían: "Tú, que destruyes el templo y en tres días lo reconstruyes, ¡sálvate a ti mismo! ¡Si eres el Hijo de Dios, baja de la cruz! "
También se burlaban de El los jefes de los sacerdotes, los maestros de la ley, los ancianos e incluso uno de los bandidos que fueron crucificados con El. Los que deberían de haberle defendido - sus discípulos - se escondieron avergonzados.
¿Has sentido la ausencia de Dios? ¿Te has preguntado dónde está en medio de tus problemas? Si no lo has sentido, es muy probable que llegará un día en el que te preguntarás: ¿Hasta cuándo? Veamos ahora cómo responde el salmo a esta pregunta.
El escritor inspirado clama a Dios. Aquí está la clave para enfrentar estas situaciones. Son pruebas de nuestra fe, y es en estos momentos que se verá dónde está puesta nuestra fe, en realidad. ¿Dónde buscaremos nuestra ayuda?
En otro salmo, leemos: "A las montañas levanto mis ojos; ¿de dónde ha de venir mi ayuda?" (Salmo 121:1). En Palestina, los altares de los dioses paganos se hacían sobre las colinas y en los lugares altos. La frase “lugares altos” se convirtió en sinónimo de los altares paganos por esta razón.
El creyente levantaba sus ojos a los montes y veía los altares de los dioses paganos, pero sabía que su ayuda no venía de ellos. Eran ídolos, figuras creadas que no tienen poder para salvar. Nuestra ayuda viene del Señor, Creador del cielo y de la tierra.
Cuando sentimos que Dios está ausente, mostramos la calidad de nuestra fe. Si al primer instante que El no responde como nosotros quisiéramos, empezamos a buscar otras soluciones que a El no le agradan, se ve que nuestra fe no es firme.
El patriarca Abraham cayó en esta trampa. Dios le prometió que él y su esposa Sara tendrían un hijo, el heredero de la promesa. Sin embargo, cuando pasaron los años y Abraham vio que ambos eran muy viejos, decidió tener un hijo con la criada de su esposa.
Dios le dijo que la promesa había sido para él y su esposa, y que se cumpliría. Dios hace las cosas en el momento que El elige, no según nuestra agenda. La promesa de Dios no había fallado, aunque tardaba en cumplirse.
De igual manera, cuando Dios parece estar muy alejado de nuestro sufrimiento, podemos saber que El está probando nuestra fe, dándonos la oportunidad de mostrar que confiamos en El. Como el salmista, clamemos a El en esos momentos. No busquemos en otras partes. Otros confían en su fuerza o en su inteligencia, pero nosotros hemos de confiar en el Señor.
Cuando lo hacemos, podemos experimentar la paz y la confianza que nacen de la fe en el Señor. El creyente retiene su confianza en Dios. Cuando las cosas no marchan de acuerdo a nuestro plan, podemos experimentar la paz de Dios a pesar de las circunstancias.
Dice la Palabra: "No se inquieten por nada; más bien, en toda ocasión, con oración y ruego, presenten sus peticiones a Dios y denle gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, cuidará sus corazones y sus pensamientos en Cristo Jesús." (Filipenses 4:6-7)
Cuando podemos decir, con David, Pero yo confío en tu gran amor, entonces también nuestro corazón se regocijará en la salvación del Señor. La salvación en este verso no se refiere solamente a nuestra salvación del pecado, a nuestro perdón. Tiene un sentido más amplio.
Se refiere a la liberación que Dios trae en todos los aspectos de nuestra vida. Dios desea, no solamente salvarnos del pecado y del infierno, sino también obrar en nuestro diario vivir. Cuando enfrentamos circunstancias difíciles, podemos saber que Dios quiere y puede ayudarnos a superarlas.
Cuando Dios obra en nuestras vidas, no se nos olvide, como el salmista, expresarle nuestra gratitud. Canto salmos al Señor, dice. Cuando la nación de Israel cruzó el Mar Rojo en su éxodo de Egipto, Moisés cantó un salmo de gratitud al Señor. Su reacción a esta gran muestra del poder de Dios fue entonarle un cántico de alabanza, mostrando su gratitud y reconociendo que había sido el Señor quien lo libró. Nosotros también podemos expresarle a Dios nuestra gratitud - aun antes de ver su respuesta.
Sabemos que Dios va a responder, así que podemos expresarle nuestra gratitud antes de tiempo. Podemos alabarle anticipadamente, sabiendo que la respuesta llegará.


Conclusión
Cuando Dios se esconde, El nos está invitando a seguir confiando en El. Está llamándonos a ponernos a trabajar, a seguir caminando, seguros de que El no tardará en respondernos.
Como David, como Job, como nuestro Señor Jesús, afirmemos nuestra confianza en el Señor y sigamos adelante, sabiendo que el enemigo será callado y que nuestra victoria es segura en Cristo Jesús.
Por El Pastor: Elieser Cruz García

Propósito Específico: Que los amigos entiendan que no importa la condición en que se encuentren a dios le importa.

Tema: Cuánto tu Le Importa a Dios

Texto: Lucas 19:1-10

INTRODUCCION: Tendemos a juzgar nuestro valor basado en cuatro cosas. Por mi apariencia: ¿cómo me veo? Por mi éxito: ¿qué es lo que he logrado? Por mi aprobación: ¿qué tan popular soy? Por mis posesiones: ¿qué es lo que tengo?


Proposición: conectemos estas cuatro cosas a la historia de Zaqueo No le gustaba la manera en que se veía. ¿Qué es lo que había logrado?

Le había robado a todos sus amigos porque era el jefe de colectores de impuestos. ¿Era popular? Absolutamente no. El sí tenía posesiones.

Zaqueo falló en tres de las cuatro maneras principales que usamos para edificar nuestra autoestima. No se gustaba a sí Mismo. No le gustaba como se veía. No le gustaba como se sentía. No le gustaba su trabajo.

Y no le caía bien a la gente. Los mayores Cambios en nuestras vidas toman lugar cuando nos vemos a nosotros mismos como Dios nos ve.

I. No importa qué tan insignificante me sienta, Jesús me nota. Qué declaración más maravillosa!

1.Cuando Jesús llegó al árbol, él miró hacia arriba.ʺ Me imagino que Zaqueo se quedó paralizado.

2. ¡Dios me está viendo! Puede haber unas 20,000 personas aquí en Jericó en este momento. Él ha caminado hasta mi árbol ¡y él
me está viendo directamente a mí! ¡Eso me conmueve!ʺ

3. Aquí tenemos a un hombre que toda su vida se ha sentido inferior. ¡Toda su vida! No le gustaba la manera en que se veía ¡Soy muy pequeño!ʺ De hecho, la palabra en el griego significa que él era un enano. Es la misma palabra para enano. Él era un enano, una persona de pequeño tamaño. Él tenía el trabajo más odiado de la ciudad. Y de todas las personas, Jesús viene a mi árbol y mira hacia arriba. Lucas 12:6 ʺDios nunca descuida una sola golondrina.
4. Él pone aún mayor atención a ustedes hasta el último detalle. Incluso hasta numerar los cabellos de sus cabezas.


II. No importa qué digan otros de mí, Jesús me afirma.

1. Jesús miró hacia arriba a Zaqueo y lo llamó por su nombre. Zaqueo le dijo. ¿Por qué es esto significante? Porque Zaqueo significa el puro.

2. Esto es la última cosa que Zaqueo era. Jesús camina entre la multitud y ve el hombre más irrespetado y le dice, ʺPuro, hoy iré a tu casa.

3. No le llamó lo que era. Le llamó lo que podría ser. El no solo sabe dónde me encuentro.

(Él conoce mi nombre)

ʺAunque mi padre y mi madre me abandonen, el Señor me recibirá en sus brazos.ʺ (Salmo 27:10).

4. Entonces no importa qué tan insignificante me sienta, Jesús me nota y no importa qué digan otros de mí, Jesús me afirma.





III. No importa lo qué he hecho, Jesús me quiere.

1.Él dice, Baja pronto porque voy a ser un invitado en tu casa hoy

2. Toda la gente vio esto y empezó a quejarse: ʹJesús se está hospedando con un pecador.

3. Puedo imaginarme esto y oírles decir, Ese pecador! ¡Ese hombre malo!
4. Jesús dijo, Aquellos que el Padre me ha dado vendrán a mí y nunca los rechazaré.

5. No importa qué he hecho, Jesús me quiere. ¿No es esto buenas nuevas?

IV ¿Cómo debería de responder a Jesús?

Él se bajó de inmediato y lo recibió con gozo.

El resultado: Pero Zaqueo dijo resueltamente, Daré la mitad de mis posesiones a los pobres, y si en algo he defraudado a alguien, le devolveré cuatro veces la cantidad que sea.

Respuesta de Jesús:

Hoy ha llegado la tu vida.

El vino a salvar y a buscar lo que se había perdido.

Dios está moviendo gente de muchas partes del mundo para traer la palabra de Dios a esta ciudad completamente gratis esa es una señal de que tu le importa a Jesús.

El Gran Sumo Sacerdote

Por: El Pastor Elieser Cruz García

Propósito Especifico: Descubrir Las Razones por las cuales el sumo sacerdocio de Cristo es Superior al de los hombres del A. T.

Tema: Cristo El Gran Sumo Sacerdote

Texto : Hebreos 4: 14-5:10

Introducción: ¿Que Es Un Sumo Sacerdote?

Es Más alto dignatario religioso, representante de la nación ante el Señor.
El sumo Sacerdote es una persona que se dedica profesionalmente, en exclusiva o a tiempo compartido, a realizar actos de intermediación entre los miembros de una comunidad religiosa y la divinidad a la que estos adoren.
Se llama «sumo sacerdote» a quien ejerce la máxima autoridad religiosa en algunas confesiones, normalmente como heredero de alguna tradición histórica significa ‘constructor de puentes’, entre Dios y sus creyentes.
Proposición: Del ejemplo que el escritor a los Hebreos pone del sumo sacerdote a prendemos el contraste que existe entre estos y Cristo. A continuación veremos este contraste ente los sumo Sacerdotes terrenales y el Sumo sacerdote Divino.
1. Los Requisitos Del Sumo Sacerdote (Hebreos 5:1-4)
Entre los israelitas, los sumos sacerdotes fueron escogidos por Dios. De hecho tenían que llenar ciertos requisitos:
a. “Todo sumo sacerdote es escogido de entre los hombres y constituidos a favor de los hombres ante Dios (v. 1). El propósito principal del sumo sacerdote es presentar oficialmente ofrendas y sacrificios por los pecados. El pecado es lo que separa a los hombres de Dios. Por eso es necesaria la mediación.
b. Que se muestre paciente con los ignorantes y extraviados (v. 2). Esta función es muy importante para estar adecuadamente calificado para la mediación y liderazgo religioso. Esto tiene que ver con el carácter del sumo sacerdote. No debe ser rudo ni impaciente, no debe ser indiferente ni despreocupado. Debe tener una profunda preocupación moral, comprensión y simpatía.
Como tal, tenía que alcanzar un claro discernimiento de los grados de culpa, distinguiendo entre la ignorancia responsable y la involuntaria; entre aquellos que están extraviados debido a su propio descuido y aquellos que han sido descarriados por causa de su propia ignorancia está rodeado de debilidades.
c. Debía ofrecer por los pecados de él mismo y por los pecados el pueblo (vs. 3). Él mismo estaba necesitado de ayuda y de mediación. Es claro que el tradicional orden de sumo sacerdotes tenía una superioridad oficial, pero no necesariamente una significativa superioridad moral. Aunque en función de su trabajo sacerdotal, estaba por encima del pueblo.
Sin embargo, era tan necesitado espiritualmente como los otros hombres pecadores.
d. Sólo los sacerdotes llamados por Dios tenían autorización de ofrecer sacrificios, como Aarón (vs. 4). No era un funcionario cualquiera. Dios había especificado que sólo Aarón y sus descendientes servirían en este oficio (Éxodo 28:1-43; 29:1-37). Aarón es el modelo. Los israelitas lo sabían muy bien. Por eso estaban atados a este sistema, que aunque fue establecido por Dios, había perdido vigencia con la venida de Cristo. Dios no estaba atado a la orden sacerdotal de Aarón. Por eso el escritor de los Hebreos les presenta a los israelitas una nueva orden superior de Sumo Sacerdote, igualmente ordenado por Dios: Jesucristo.

2. Cristo Cumple Los Requisitos Sacerdotales (Hebreos 5:5-10)
a. Cristo fue ordenando por Dios (5:5). El sacerdocio de Cristo era superior. Así como Aarón fue ordenado por Dios, también Cristo fue ordenado por Dios. Por eso Cristo nunca se glorificó así mismo, haciéndose sumo sacerdote, sino que Dios quien le dijo: “Tú eres mi Hijo amado”. “Tú eres sacerdote para siempre, según el orden de Melquisedec” (vss. 5-6).
b. Cristo la persona ideal (5:7-10). Aquí se resume la idoneidad de Jesucristo. En los capítulos siguientes se desarrolla en detalle. Los sacerdotes aarónicos podían simpatizar porque ellos también estaban expuestos a pecar. Los padecimientos de Cristo sirvieron para un propósito semejante, pero aún más efectivamente, porque el sufrimiento de un sentimiento de compasión y hermandad constituye mucho mejor que la pecaminosidad. Los sufrimientos de Cristo fueron necesarios para perfeccionarse como sumo sacerdote. Esto le capacitó para ser autor de eterna salvación.
(1) La intercesión a favor de los suyos (vs. 7). En los días de su vida terrenal ofreció ruegos y súplicas con gran clamor y lágrimas. Esto era un deber para los sumo sacerdotes, hacerlo. Jesús no lo hizo como los sumo sacerdotes tradicionales. Él lo hizo con sudor y sangre en el huerto. Rogó con gran clamor y lágrimas al que podía librarle de la muerte; fue oído a causa de su clamor reverente.
Una comprensión adecuada de esta declaración nos ayuda a comprender la causa y naturaleza de su muerte. El sufrimiento profundo de Cristo fue por todos los humanos. Él sufrió, por un momento, el desprecio del Padre por el pecado. La razón es que Cristo, aunque nunca cometió pecado, se hizo pecado por nosotros a fin de cumplir toda justicia. Aunque el clamor de Cristo fue oído, no fue quitada la copa de la muerte, por lo cual somos salvos. Dios lo escuchó con compasión enviándole ángeles.
(2) La obediencia que aprendió (5:8). Sus padecimientos le enseñaron el significado de la obediencia. No que Él fuera desobediente, sino que sólo la obediencia que cuesta es la que alcanza una nueva dimensión. Para Cristo obedecer a su Padre fue un deleite. Cuando la obediencia pasa por un corazón destrozado es más genuina.
Nuestro Señor tuvo que aprender esto por su propia experiencia, aunque era Hijo de Dios (vs. 8). Si el Hijo iba a ser un Sumo Sacerdote Salvador, adecuado para todas las necesidades de los hombres, debía recorrer todo el camino y ser aprobado en todo sentido. Sólo un Sumo Sacerdote perfectamente sumiso a Dios, podría representar adecuadamente a Dios ante el hombre, y al hombre ante Dios. Debía cumplir su vocación como siervo sufriente de Dios (Isaías 52:13 – 53:1-2).


B. La Perfección Absoluta De Cristo (Hebreos 5:9-10)
“Y habiendo sido perfeccionado (vs. 9). Esto indica que cuando calificó como Sumo Sacerdote, vino a ser autor de eterna salvación para todos los que le obedecen.
Cristo fue y es Sumo Sacerdote Perfecto por su obediencia perfecta. Él cumplió con las exigencias aarónicas para la realización de su función sacerdotal. Esto se cumplió en el huerto cuando dijo: “No se haga mi voluntad, sino la tuya.
Fue desde la cruz donde Jesús calificó o “vino a ser autor de eterna salvación para todos los que le obedecen” (vs. 9).
Como autor, Jesús es creador y fuente de eterna salvación. Como autor es el que causó la salvación. El sacerdocio aarónico no fue ni siquiera eficiente como mediador, menos para crear y ser autor de eterna salvación como la que Cristo da. Literalmente Cristo llegó a ser para todos los que le obedecen, autor de eterna salvación
Vs. 10. Declarado por Dios Sumo Sacerdote según el orden de Melquisedec”. Esto es para darle validez, en el sentido de que Él era el perfecto cumplimiento de la Escritura, de acuerdo con el preciso propósito de Dios.
Otras Cualidades:
1. Traspasó Los cielos Heb.4:14 “Por tanto, teniendo un gran sumo sacerdote que traspasó los cielos, Jesús el Hijo de Dios, retengamos nuestra profesión”.

2. Se Compadece de nuestras debilidades Heb. 4:15 “Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado”.
3. “Jesús es hecho fiador de un mejor pacto”. Heb.7:23
4. “Permanece para siempre, tiene un sacerdocio inmutable”. Heb. 7:24
5. “ Salva perpetuamente a los que por él se acercan a Dios, viviendo siempre para interceder por ellos”.

Cualidades Morales
7:26 Porque tal sumo sacerdote nos convenía: santo, inocente, sin mancha, apartado de los pecadores, y hecho más sublime que los cielos;
7:27 que no tiene necesidad cada día, como aquellos sumos sacerdotes, de ofrecer primero sacrificios por sus propios pecados, y luego por los del pueblo; porque esto lo hizo una vez para siempre, ofreciéndose a sí mismo.

7:28 Porque la ley constituye sumos sacerdotes a débiles hombres; pero la palabra del juramento, posterior a la ley, al Hijo, hecho perfecto para siempre.

Abogado Mediador
8:1 Ahora bien, el punto principal de lo que venimos diciendo es que tenemos tal sumo sacerdote, el cual se sentó a la diestra del trono de la Majestad en los cielos,

8:2 ministro del santuario, y de aquel verdadero tabernáculo que levantó el Señor, y no el hombre.
8:3 Porque todo sumo sacerdote está constituido para presentar ofrendas y sacrificios; por lo cual es necesario que también éste tenga algo que ofrecer.

9:11 Pero estando ya presente Cristo, sumo sacerdote de los bienes venideros, por el más amplio y más perfecto tabernáculo, no hecho de manos, es decir, no de esta creación,

9:12 y no por sangre de machos cabríos ni de becerros, sino por su propia sangre, entró una vez para siempre en el Lugar Santísimo, habiendo obtenido eterna redención.

9:13 Porque si la sangre de los toros y de los machos cabríos, y las cenizas de la becerra rociadas a los inmundos, santifican para la purificación de la carne,

9:14 ¿cuánto más la sangre de Cristo, el cual mediante el Espíritu eterno se ofreció a sí mismo sin mancha a Dios, limpiará vuestras conciencias de obras muertas para que sirváis al Dios vivo?

9:24 Porque no entró Cristo en el santuario hecho de mano, figura del verdadero, sino en el cielo mismo para presentarse ahora por nosotros ante Dios;
9:25 y no para ofrecerse muchas veces, como entra el sumo sacerdote en el Lugar Santísimo cada año con sangre ajena.

9:26 De otra manera le hubiera sido necesario padecer muchas veces desde el principio del mundo; pero ahora, en la consumación de los siglos, se presentó una vez para siempre por el sacrificio de sí mismo para quitar de en medio el pecado.

9:28 así también Cristo fue ofrecido una sola vez para llevar los pecados de muchos; y aparecerá por segunda vez, sin relación con el pecado, para salvar a los que le esperan.
10:10 En esa voluntad somos santificados mediante la ofrenda del cuerpo de Jesucristo hecha una vez para siempre.

10:11 Y ciertamente todo sacerdote está día tras día ministrando y ofreciendo muchas veces los mismos sacrificios, que nunca pueden quitar los pecados;

10:12 pero Cristo, habiendo ofrecido una vez para siempre un solo sacrificio por los pecados, se ha sentado a la diestra de Dios,

10:14 porque con una sola ofrenda hizo perfectos para siempre a los santificados.

Conclusión: Acerquémonos con confianza a nuestro Sumo Sacerdote
4:16 Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro.
Trae tu intercesión Al Padre , por tu tiene un abogado a su derecha que ya entro por ti.
Ej. De Jesús y María Magdalena.